LA INSEGURIDAD: UN FRENO AL DESARROLLO PERSONAL Y A LA VIDA

Numerosas personas consultan por tener baja su autoestima o no disponer de seguridad en sí mismos para abordar aspectos de la vida tales como un cambio de trabajo, emprender un proyecto, discapacidad para mejorar en su ámbito social, iniciar una relación o llevarla a término por miedo a la soledad, etc.

Analizando este carácter de la persona descubrimos una inmadurez en la base de la personalidad inconsciente cuyo origen guarda relación, entre otras causas, con lo que llamamos la fase del espejo. Los primeros modelos de identificación son nuestros padres, hermanos, tíos e incluso abuelos, mayormente con las personas que convivimos en la infancia, el niñ@ se identifica y copia del carácter de los padres, de los hermanos mayores, constituyéndose su inicial forma de ser a través de un complejo mecanismo de identificación. Quiere esto decir que unos padres con baja autoestima o de escasos recursos psicológicos educativos, terminan produciendo un “espejo defectuoso” donde miran, se reflejan y copian sus hijos.

Otra causa, también de origen infantil guarda relación con los desplazamientos afectivos que todo niño siente alguna vez en relación a los hermanos. Los celos son vividos por el niño  como un“desamor” por parte de los padres, experimentando el sentimiento de “sentirse menos importante o valer menos” para ellos. Otro motivo guarda relación con descubrimientos casuales sexuales que acontecen de manera inadecuada y al niño se le genera una inseguridad cuando no logra entender lo que ha visto o vivido.

Todas y cada una de estas posibles causas (podríamos añadir otras no tan generales pero igualmente influyentes) generan una base débil en el edificio de la personalidad. Podemos afirmar que un adulto inseguro es un niño que no ha resuelto aquello que originó su inseguridad o falta de autoestima.

Las consecuencias para la vida adulta no son para nada esperanzadoras pues el supuesto adulto trata de conducirse como tal pero a nivel inconsciente es un niño que adolece de poder pensar la vida mas allá de lo que siente y experimenta a nivel inconsciente.

Este estancamiento por así decirlo de la personalidad genera una inmadurez que se puede prolongar por toda la vida, sin saber la persona que nunca dejó de ser un infantil sujeto sujetado a una infancia donde se quedó anclado a ciertas emociones y afectos.

El psicoanálisis es una ingeniería de palabras que puede analizar dicha estructura infantil en la cual la persona se ha quedado anclada y producir una nueva base sobre pensamientos actuales, no sin antes haber modificado la estructura antigua. Sobre la base nueva, la persona deja de experimentar miedos, inseguridad o falta de autoestima, ya que reconstruimos la personalidad mediante un nuevo proceso de identificación, esta vez mas maduro y seguro. Es algo complicado de entender pero eficaz y resolutivo si lo es.

Compártelo para ayudar a otras personas
Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
Linkedin
Share on whatsapp
Whatsapp

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *