CONFERENCIA DE INTRODUCCIÓN AL PSICOANALISIS (1)

INTRODUCCIÓN AL PSICOANÁLISIS (1).

Bienvenidos al Semanario Sigmund Freud. Mi nombre es Miguel Martínez y son Médico Psicoanalista de la Escuela de Psicoanálisis Grupo Cero. Nos introducimos hoy en el estudio del campo psicoanalítico, campo del deseo, del trabajo y del amor, donde se pone en juego la forma de vivir y de morir del sujeto.

Nos dice Freud que existen tres tipo de sueños. Un primer tipo, que tenía sentido y comprensibilidad, un segundo tipo de sueño, que si bien tenía sentido, no tenía comprensibilidad, y por último, un tercer tipo de sueño, que ni tenía sentido ni comprensibilidad. El después de todo un trabajo de investigación, concluyó que los tres tipo de sueños eran formas diversas de lo mismo: la realización disfrazada de un deseo sexual infantil reprimido, entendiendo el deseo sexual como el motor que mueve la vida del sujeto.

En psicoanálisis entendemos por sexualidad, las relaciones del sujeto con lo otros. El modo de amar, desear, pactar, odiar, trabajar, destruir y autodestruirnos en cada uno de nosotros, está determinado por nuestros deseos y cómo dichos deseos hacen que nos relacionemos con los otros.

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¿Cuales son las fases del desarrollo del trastorno obsesivo compulsivo? (toc)

Cómo entender la neurosis obsesiva.

1. Las experiencias sexuales en la infancia son determinantes.

    1. Primero suelen ser de carácter pasivo y luego de carácter activo pero llevadas a cabo con placer y o con gozosa participación en actos sexuales. La participación activa es mas propia de varones y la participación pasiva es mas en las chicas, aunque nos encontramos que durante la fase masculina del desarrollo femenino las niñas tiene una marcada actividad sexual infantil.

    2. La esencia u origen de la neurosis obsesiva puede encerrarse en una fórmula: las representaciones obsesivas son reproches transformados que retornan de la represión y se refieren siempre a un acto sexual de la niñez llevado a cabo con placer.

  1. La neurosis obsesiva se desarrolla:

    1. en un primer periodo al que llamamos el periodo de la inmoralidad infantil. El niño aquí no tiene ni noción de maldad, solo sabe que lo que hace le da placer. Una vez que pasa a la actividad y lleva a cabo lo aprendido sexualmente con otros niños o adultos, será este el motivo de los futuros reproches del obsesivo. Este periodo puede duran los primeros años hasta que aparece la maduración sexual.

    2. En este segundo periodo, ahora los recuerdos placenteros van asociados a un reproche y se trata de reprimir las primeras experiencias a través de la vergüenza, los escrúpulos, la desconfianza en sí mismo. Son síntomas con los cuales comenzará

    3. El tercer periodo: el de la salud aparente y en realidad de haber logrado reprimir las experiencias sexuales precoces placenteras.

    4. El cuarto perido es el de la enfermedad y se caracteriza por el retorno de los recuerdos primitivos, es decir, ha fracasado la defensa y vuelven los recuerdos sexuales precoces pero esta vez vienen asociado a reproches. A veces los recuerdos pasan a la conciencia pero otras veces sufren alteraciones, se modifican y se convierten en pensamientos y actos obsesivos. Que no dejan de ser los recuerdos, actos sexuales vividos pero deformados. Por ejemplo, una chica que se lavaba mucho las manos era por el placer sexual que sentían tocando el pene a otros niños. Lavarse las manos equivalía para ella el acto satisfactorio de tocar los penes y a la vez, lavarse las manos como reproche, vergüenza y escrupulosidad por haber tocado penes con placer. Otra chico que había sido abusado por la hermana en su cama y con la cual mantuvo un tiempo relaciones sexuales, hacía rituales de poner objetos alrededor de la cama en un orden casi perfecto. De esta manera el ritual equivalía a haber hecho el acto sexual con la hermana y a la vez defenderse por vergüenza y culpa contra ello, poniendo objetos alrededor de la cama como si quisiera impedir así que el acto sexual con la hermana no pasara.